lunes, 24 de marzo de 2008

MARTIRIO DE MONS. ROMERO

1 comentario:

Iniciativa Ciudadana dijo...

Hola Gustavo...te envie por correo un texto con reflexiones a proposito de Mons. Romero, pero no se si lo recibistes. Lo reproduzco a continuación. Muchos saludos.

Rodrigo (El ziwi)


IGLESIA JOVEN Y MONS. ROMERO...

A los 28 años de la muerte y resurrección martirial de Oscar Romero (1917–1980), su proceso de canonización, parece continuar por buen camino, y se siente que al menos su beatificación podría no estar lejos. Recientemente, Mons. Rosa Chávez compartió además, que con las nuevas disposiciones de la santa sede, las beatificaciones pueden ser oficiadas en los países de origen, lo que haría suponer que la beatificación de Mons. Romero sería aquí en nuestro El Salvador.

El Papa Benedicto XVI, en el encuentro sostenido recientemente con el episcopado salvadoreño en el Vaticano, se ha referido a Mons. Romero como un “pastor lleno del amor de Dios” que predico el evangelio, arraigando profundamente la fe en esta tierra (El Salvador), que ha dado abundantes frutos de vida cristiana y santidad. Este reconocimiento de parte del Santo Padre a la labor pastoral de Romero es gratificante y nos llena de esperanza, de que el proceso esta vigente, y avanza aunque sea despacio, pero con el favor y voluntad de las autoridades eclesiásticas.

Cierto es también que antes de esa canonización oficial ha tenido lugar una canonización “popular”, como escribía don Pedro Casaldáliga: “En vida el pueblo te hizo santo”. El Padre Jon Sobrino S. J. afirmó que “ese mismo pueblo lo quiere como a un santo, pero no sólo como a un santo “de altar”, que intercede y concede favores, sino también como a un santo “de familia”, a quien se le quiere entrañablemente...” y lo que es mas, es alguien sumamente querido no solo por el pueblo de El Salvador, sino por gente de muchas partes del mundo, católicos o cristianos de otras denominaciones, reconocen a Romero como un Santo no solo de El Salvador, sino de todos los pueblos…Esto sin duda es también un signo de esperanza, de que el espíritu santo continua obrando a través del legado de amor que el testimonio de Romero significa para tantas personas.

En nuestra Iglesia Joven, A Mons. Romero se le quiere en forma profunda y especial, y su testimonio, ha inspirado a cientos de jóvenes que han vivido la experiencia del grupo, al compromiso cristiano y a la vivencia de una fe autentica y solidaria, consciente y liberadora. No podemos dejar de mencionar que la figura de Mons. Romero inspira buena parte del Itinerario formativo de XJ, tan es así que en el II Concilio de Iglesia Joven (1990) donde se formaliza todo el conjunto del proyecto pastoral del grupo se le da al nivel de Confirmación en la Fe, el nombre de “Mons. Oscar Arnulfo Romero”. Ha sido así desde los inicios de este nivel, y se ha transmitido así a todas las sedes de XJ, inclusive las internacionales. Es innegable que muchos jóvenes (incluido yo) por el hecho de haber sido infantes en 1980, o algunos que ni siquiera habían nacido, sabíamos poco o nada de Romero hasta antes de estar en Iglesia Joven, y por tanto la herencia de Romero se la debemos también a nuestro querido grupo. Me gusta pensar así en forma utópica, que Los apóstoles, Don Bosco, Romero, y otros santos que conocimos en nuestra formación en el grupo, están presentes siempre en nuestras vidas, invitándonos al seguimiento decidido de Jesús, aun ahora siendo adultos (jejeje…por no decir viejos) en nuestros ambientes actuales, y que somos por ello al mejor estilo Salesiano, “buenos cristianos y honrados ciudadanos”, somos por esa formación recibida mejores profesionales, mejores empleados o empresarios, mejores cónyuges, mejores padres de familia, mejores ciudadanos y por que no, mejores lideres en este país que tanto necesita de gente que dirija bien las riendas del país, que mejor que personas guiadas por el credo del Evangelio y tocados por el testimonio de Mons. Romero en nuestro país. Que bueno ha sido conocer la historia de nuestro país a través de Iglesia Joven, y con ello, comprometernos juntos en la transformación de nuestra sociedad.

Sueño también que algún día, que espero sea cercano, podamos asistir juntos como comunidad, todos los que llevamos en el corazón a Iglesia Joven, a ese acto, donde se proclame oficialmente la santidad de nuestro pastor, y junto con el, de forma simbólica, se devuelva la dignidad a los mártires y a las victimas de nuestro país, así como ha sido con el resucitado, Jesús, que fue mártir, pero a quien Dios le hizo justicia y lo resucitó de entre los muertos. Esta es nuestra fe y nuestra mayor esperanza.

Un saludo a todos y un gran Abrazo, Cristhos Anesthis...



José Rodrigo Torres
Ex - Asesor del Nivel de Confirmación,
Ricaldone (1997 – 2001),
Santa Cecilia (2002 – 2004).