2.2.1.- Perfil y funciones.
El principal Animador de Iglesia Joven es el Espíritu Santo.
El Animador local es la cabeza del Cenáculo General, centro unificador de todas las fuerzas de la Iglesia Joven Local, es el principal responsable e interesado en promover y estimular los valores evangélicos que se transmiten en el crecimiento en la fé para que los miembros de las comunidades alcancen el objetivo del Itinerario Pedagógico.
Para desarrollar esta función el Animador local debe tener un coloquio fraterno y frecuente con su Director Espiritual para mantenerse en comunión con la Iglesia.
Es sobre todo el que anima el espíritu de los miembros de Iglesia Joven, pastor de toda la comunidad y guía del camino de crecimiento.
Tiene principal responsabilidad en la formación particular de todos los miembros de la Comunidad Local asistiéndolos salesianamente, preferencialmente a los que ya han hecho su Asamblea de Identificación.
Debe tener un coloquio fraterno al menos con los miembros de su cenáculo general dos veces al año para conocerlos, seguirlos, alentarlos, unirlos, ayudarlos a salir de las crisis, etc.
Su presencia debe ser como la del “alma en el cuerpo”, continua y atenta, comprensiva y afectuosa, orientadora y conductora.
En virtud de su función tiene potestad ordinaria e inmediata sobre todos los miembros de la Iglesia Joven local, así como también de los bienes y recursos materiales de toda la Comunidad Local. Su potestad lleva el derecho de discernir y decidir lo que hay que hacer a consejo de su Cenáculo General.
En casos de suma urgencia o cuando no exista consenso dentro del Cenáculo General la Animación Local tomará las decisiones pertinentes.
La Animación Local de Iglesia Joven ejerce su servicio en unión con el Coordinador Nacional y las otras Animaciones Locales de Iglesia joven.
Así mismo, es la Animación, con ayuda de su Cenáculo General, quien promueve iniciativas de evangelización creativas valiéndose de los Ministerios de Alabanza, Comunicación Social, Diaconía, Oración y el Cenáculo de Asesores.
La Animación es quien trae a la Comunidad el espíritu de los primeros cristianos tanto en su acción como en sus palabras, en la conservación de la tradición y los signos y símbolos del grupo.
La Animación Local pertenece a toda la Iglesia Joven Local por el cual es miembro de todas las comunidades particulares aunque posee una comunidad particular de referencia.
Es el principal responsable, junto al Asesor Espiritual, de la animación y dirección del Cenáculo Intimo, órgano de formación específico de los Cenáculos de Iglesia Joven.
2.2.2.- Elección y Duración del cargo.
La elección del Animador se hace de acuerdo al “Reglamento de la elección del Animador Local de Iglesia Joven”
La Animación obtiene la plenitud de ocupar su cargo después de la Eucaristía de confirmación del cargo, que debe ser realizada en un plazo no menor de dos semanas ni mayor de cuatro luego de realizada su elección.
Si pasado éste tiempo aún no se ha realizado la Eucaristía de confirmación, ejerce con plena potestad su cargo de pleno derecho.
El oficio de Animador (a) tiene un período de duración de tres años desde el momento de la Eucaristía de Confirmación pudiendo ser reelecto una sola vez como Animador de esa Comunidad local.
Si alguno ó ambos miembros de la Animación, renunciase a su oficio se requiere para la validez de la renuncia sea libre y se manifieste formalmente, pero no que sea aceptada por nadie.
Para que posea carácter formal la renuncia al cargo debe hacerse de forma escrita y debe dársele lectura en una reunión del Cenáculo General.
En este caso será la Animación local o el Pastor General mas antiguo quien convocará, en un plazo no mayor de cuatro semanas, al Cenáculo General para iniciar el proceso de elección.
En caso de que la animación fallare grave, pública y/o notoriamente en el desempeño de su cargo, a buen juicio del cenáculo general, será el otro miembro de la animación quien llame la atención al miembro que estuviere fallando dentro de la animación, si el mal desempeño persiste el cenáculo general completo hará el llamado de atención de quien fallare, de no funcionar esto el cenáculo general exigirá la renuncia.
Después de haber exigido la renuncia, el cenáculo general elaborara el acta donde se hace constar los motivos de dicha destitución la cual será presentada a la Coordinación Nacional y al Director de la casa Salesiana.
