El Papa Benedicto XVI hizo esta tarde un anuncio histórico al anticipar la creación de un nuevo Consejo Pontificio para reevangelizar los países occidentales de tradición católica que "registran una progresiva secularización de la sociedad y una especie de eclipse del sentido de Dios".
Ante los miles de asistentes al rezo de las vísperas en la solemnidad de San Pedro y San Pablo en la basílica de San Pablo Extramuros, el Pontífice explicó que "hay regiones en el mundo donde el Evangelio echó raíces a lo largo de los tiempos, dando lugar a una verdadera tradición cristiana, pero donde en los últimos siglos, con dinámicas complejas, el proceso de secularización ha producido una grave crisis del sentido de la fe cristiana y la pertenencia a la Iglesia".
El Santo Padre señaló que hay otras regiones en el mundo que todavía esperan una primera evangelización y otras que aunque ya lo han recibido necesitan un trabajo "más profundo".
En este contexto, afirmó que es necesaria una "nueva evangelización" ya que el hombre del tercer milenio tiene un "hambre más profunda", que sólo Dios puede saciar.
"El hombre del tercer milenio desea una vida auténtica y plena, necesita verdad, libertad profunda y amor gratuito. Incluso en los desiertos del mundo secularizado, el alma del hombre tiene sed de Dios", agregó.
Benedicto XVI consideró que el desafío es encontrar los medios adecuados para volver a proponer la "perenne verdad del Evangelio de Cristo” y –refiriéndose a la presencia de una delegación de la Iglesia Ortodoxa en el templo- recordó que la nueva evangelización exige “la búsqueda de la unidad plena de todos los cristianos".
Este será el primer dicasterio vaticano creado desde que el Papa Juan Pablo II creara el Consejo Pontificio para la Pastoral de la Salud en 1985. En abril pasado, el vaticanista italiano Andrea Tornielli predijo la creación del nuevo consejo considerándolo "la novedad más importante del pontificado del Papa Benedicto XVI."